Santa Sangre 14: Ilsa Harem Keeper of the Oil Sheiks 1976

Buenas noches consumidores de basuras infrahumanas, es un placer en esta nueva oportunidad compartir un excéntrico largometraje que conforma la trilogía más candente que el cine de explotación setentero nos ha regalado en su efímera duración. Pero previamente a comenzar mis infames reseñas, se debe descubrir quién fue la mujer que tuvo los ovarios bien grandes (para no decir otra cosa) en liderar esta polémica y jocosa movida.

El Destape

El cine de Explotación (Exploitation en ingles) parió muchas variedades en su forma. Indirecta e inconscientemente, diversas cintas en su desarrollo engendraron tan fuerte personalidad que sirvió de forma inmediata para plasmar un estilo, un sub - género, un modus - operandi característico que serviría para la creación de futuros largometrajes. Un ejemplo más sencillo: el dichoso Sexploitation, o sea la explotación del sexo. Ojo a no confundirnos, esto no es pornografía. Muchas veces he citado en este blog, que los '60 y '70 atravesaron una revolución socio - cultural "occidentalizada" muy grande. El cine de terror y explotación no tardó demasiado en manifestar las consecuencias de esa mutación, sobrepasando cualquier traba moral de la época apostando a situaciones que hasta esos momentos no habían sido experimentadas en la gran pantalla.

La premisa "Todo Vale" no se hizo esperar, era el momento justo para esculpirla en los cines. Miles y miles de directores dedicados a filmes de bajos e irrisorios presupuestos decidieron reventar al máximo tópicos tabús, con polémicas y provocativas tramas que si bien no alcanzarían el fastidioso estatus elitista "hollywoodense", podrían hallar refugio en los cines Grindehouse donde lo más barato e independiente era consumido por miles de personas. Y así fue, existieron una seguidilla de películas donde las tramas eran relacionadas al erotismo más aférrimo, el sexo más trillado y los desnudos en incremento, donde la mujer jugaba un rol ambivalente pasando de la sumisión a la violencia salvaje. No importaba que pasaba, el morbo corría por otro lado. De a poco se verían Mujeres Encarceladas cachondas y con ganas de masacrar muchachos (los famosos Women in Prison Film), Emmanuel (es) viajando por el mundo y otros fetichismos del más burdo. Gestando películas que iban más allá de lo atrevido, por su alto grado de sexualidad, bizarreada y desfachatez. Sin embargo lamentablemente todo llegó a su fin... El momento en que se legaliza la pornografía a nivel audio visual fue la hora exacta donde el Sexploitation dejó de ser un negocio rentable, convirtiéndose en un cliché en peligro de extinción. De todos modos gracias década del '70 por tantos regalos.

Dyanne Thorne, la Femme Fatale del Sexploiation

Dyanne Thorne es una mujer que con su voluptuoso e inconfundible cuerpo no solo ha demostrado que mientras mas curvas mejor, sino que se puede interpretar con frialdad y maldad a unos de los personajes más ácidos y bizarros de una generación. Esta dama fue la responsable de inmortalizar a Ilsa, una yegua hija de puta que con su belleza y sadismo logro inmortalizarse dentro del cine de explotación. Es verdad, Dyanna Thorne no tiene mucho poder de interpretación, representa al típico caso donde una actriz se encasilla en un personaje sin posibilidad de poder encarar otros papeles diversos. A los pocos años de Ilsa, Thorne no vuelve a interpretar un protagónico. A decir verdad, no vuelve hacer cine. Junto al Sexploitation muere su carrera actoral.

Obviando la afirmación de que Dyanne Thorne es simplemente Ilsa, la trilogía liderada por este personaje luego de su visionado no deja indiferente a nadie. A tal punto de transformarse en musa para muchos otros personajes nacidos en la posterioridad. "Cuantas" le habrán dedicado aquellos incautos jóvenes, que por inercia o curiosidad habrán decidió mirar un film de esta mujer. Por eso en este blog decidí hacer un pequeño reconocimiento a este lisérgico, sensual e inolvidable icono de los´70 (en lo que respecta al cine serie B ). Aunque se haya retirado hace mucho tiempo y se dedique a sus 72 años a casar parejas junto a su marido en Las Vegas, habrá que recordarla por lo que fue: Dyanne Thorne la imponente modelo Pin Up que a sus 31 años dio vida a la psicótica, descarada y candente Ilsa.

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ILSA, HAREM KEPPER OF THE OIL SHEIKS (1976)

Entre lo erótico y basura, Ilsa es la madre de las madres. Podría nombrar la delirante saga erótica de Emanuelle y sus aventuras alrededor del mundo, pero me quedo con Ilsa. Su fría y fatal presencia no pasa desapercibida, en especial su particular cinismo cuando decide torturar a sus víctimas. La trilogía de Ilsa (“The Wolf of the SS” – “The Tigress of Siberia”- “The Harem Keeper…”) no es para tomársela enserio, a pesar de que dos de sus tres historias sean presentadas con la trillada frase "basado en hechos reales", es un excusa de relleno, un ilógico pretexto para mostrar en pantalla altas dosis de sexo y tortura, nada más. Esta saga arrastra seguidores desde hace mucho tiempo, siendo considerada de "culto". Ese destello de gloria se debe a que su protagonista fue Dyanne Thorne, bomba sexual de las producciones serie B de los `70.

El cine de explotación orientado hacia el destape "sexual" ofrece eso, escenas de sexo soft, suaves y a veces (va, la mayoría de las veces) mal hecha. Lo especial que consagró la trilogía de Ilsa es que pudo ensamblar ese tópico con la violencia. Ese doble morbo hace que estos filmes perduren en el tiempo, destacándose por su mezcla de sexo y sangre. Las actuaciones no son sobresalientes, rozan la mediocridad gracias a gestos sobreactuados, no sabes si están llorando o reteniendo un pedo. Pero todo se nubla ante los ojos del espectador cuando la Thorne pela las tetas. Ahí no importa si tenemos en frente a Robert De Niro o Ricardo Fort. “Harem Keeper of the Oil Sheiks” es la más floja de las tres, escatima bastante al momento de ensañarse con la tortura, haciendo más hincapié en los desnudos y los ridículos deseos sexuales del Sharif. Algunas escenas de violencia son destacables, como cuando Ilsa experimenta en mujeres instalándoles dispositivos que explotan cuando llegan al orgasmo (ajá, como leyeron).

Comento brevemente de qué carajo se trata esta historia: Tenemos al Sharif, gobernador absoluto de un emirato árabe que cuenta con ricos yacimientos petrolíferos. El Sharif además de tener mucha guita, decide secuestrar jóvenes y hermosas mujeres para explotarlas como esclavas sexuales. Ilsa es la encargada de secuestrar a estas jóvenes y torturarlas sádicamente con distintos artefactos. La diferencia más potente con otras entregas de la saga es que acá Ilsa es empleada del Sharif, el decide sobre ella. En cambio en las otras tramas era Ilsa la que manejaba la batuta, aquel que desafiara sus órdenes, cobraba. La narrativa por baches, pierde agilidad, haciéndose cansina y repetitiva. Sobro todo en aquellas escenas entre Ilsa y su enamorado yanky que le da matraca en toda la película o los primeros planos a la ridícula cara de churrasco del Sharif. Lo mejor es el final, el momento en que se pudre todo y vemos acción berreta y delirante. El que quiera sexo, sangre, tiros, algo de tripas, castraciones, tetas, jeques, nazis, rusos, árabes, venganza, explosiones vaginales, orgías, sado-masoquismo, fetichismo, torturas y otras inmundicias al mejor estilo serie B de los ´70 recomiendo TODA la trilogía perteneciente a este personaje. Es para hacer maratón. "Harem Keeper..." no es lo mejor del paquete, es la menos nombrada y recordada. Se rescata por la brutal presencia de Dyanne Thorne. Estos film son todo los que nos queda de ella. “Ilsa The Harem Keeper of the Oil Sheiks” aquí donde las Femme Fatale torturan por laburo, SantaSangre14.